¿Sabes cuánto impacto tiene tu ayuda?
Nos complace presentarte a Ana Laura, una historia que demuestra cómo, gracias a tu apoyo, todo es posible y juntos podemos seguir transformando vidas.
Mi comunidad se transforma como el brillo de las estrellas.
“Hola, me llamo Ana Laura, tengo 9 años, soy una niña apadrinada por World Vision México. Mi papá se llama Leonardo, mi mamá se llama Felicitas y mi hermana es Maribel de 4 años. Somos una familia feliz y convivimos con todas las familias, las niñas y niños de la comunidad de una manera bonita. Pasamos más tiempo con mi mamá, porque mi papá sale a trabajar fuera de la comunidad. Con ella nos entendemos bien y siempre nos ayuda en todo: nos hace de comer, nos ayuda con la tarea y jugamos en los tiempos libres de mamá.
Quiero contarles que en mi comunidad antes no contábamos con escuela. Las niñas y niños tenían que ir a estudiar a otra localidad para tener clases, y para conseguir agua era muy difícil, porque se tenía que caminar distancias retiradas y traer muy poca agua.
Las niñas y niños eran descuidados en su higiene personal, alimentación y en las formas de cuidado. No teníamos un espacio donde jugar y convivir con todos mis amigos. Además, la carretera estaba en malas condiciones y mi comunidad no se veía bien por todo lo que pasaba.
También te puede interesar cómo impactamos una comunidad en Veracruz, da clic aquí
Cuando llegó World Vision Mexico a mi comunidad, trajo esperanza y mucha alegría para todas las niñas y niños. Mi mamá me inscribió en el programa y hemos estado participando en todas las actividades que realizan. Nos gusta demasiado porque siempre nos hablan de que las niñas y niños somos importantes y que tenemos derechos que nos protegen cuando alguien intenta hacernos daño.
Fue así como mi mamá, mi hermana y yo asistimos a las sesiones de Cambio Comunitario. Ahí nos enseñan que trabajando juntos podemos cambiar la comunidad. Nos preparan para resolver nuestros problemas que están afectando a las familias. Es algo muy divertido, ya que todas las mamás dibujan y platican sobre cosas que podemos hacer para vivir mucho mejor.
Gracias a World Vision México y al Consejo Nacional de Fomento a la Educación, las niñas y niños han cambiado sus vidas. A las mamás les enseñaron que deben dar amor y afecto a sus hijos, y que la salud es lo primero, donde ahora vemos a niñas y niños más limpios y con una alimentación más saludable.
Contamos con una escuela donde estudiamos, tiene techo para nuestros juegos, cantamos, bailamos y mi comunidad ahora tiene un brillo como las estrellas. Estamos felices y contentos por todo el cambio que ha sucedido en las familias y, en especial, en las niñas y niños.”
Conoce más sobre cómo impacta el apadrinamiento aquí.
Eres una pieza clave para seguir creando historias como la de Ana Laura, donde gracias a tu apoyo, no solo impactas la vida de Ana Laura y su hermana, sino también la de toda su comunidad.
¡Gracias por hacer que la niñez de México brille en todo su esplendor!